Todo empieza con un ligero picor que cada vez se hace más fuerte, la oreja se nos pone roja y parece que se hincha y arde cada vez más. En algunos casos la zona empieza a humedecerse y produce escamas. y aunque hablemos de alergia a pendientes también puede pasar con pulseras, anillo y colgantes.
Esta molestia se llama eccema alérgico de contacto y está producida por metales con alto poder de penetración en la piel.
Casi siempre las alergias a los pendientes provienen de los materiales que emplean los fabricantes, dado que los metales que se emplean en joyería muchas veces suelen contener níquel, plomo o cobalto.
¿Pero qué hago cuando empiezo a sufrir esas molestias? Porque nunca la solución es dejar de usarlos ni los pendientes ni las gargantillas ni las pulseras. Un consejo práctico y económico es apostar por joyas artesanales, que no lleven níquel ni plomo y que sean hipoalergénicas o anti alérgicas, como es el caso del acero inoxidable en nuestras joyas, también puedes apostar por plata de ley, oro 14k o Titanio etcétera.
Para nuestra paz, esas alergias se reproducen más en el verano debido al sudor y a la humedad.
Siempre digo que las chicas sabías, se anticipan a los eventos, ¡¡¡Sé sabía!! empieza a comprar con inteligencia y apostando por la sostenibilidad (pendientes de corcho) y la comodidad.